¿Cómo atar una bufanda tejida?
El clima fresco significa accesorios cálidos. Hoy en día, estos artículos de vestuario no solo tienen una carga práctica, sino que también tienen una dirección estética. La imagen completa puede depender de la elección de un accesorio.
De los hermosos elementos cálidos de un traje, una bufanda es hoy un artículo que cambia radicalmente todo el estilo. No solo calienta en el frío, agregando comodidad, sino que también puede dar un toque de elegancia, romance y originalidad.
Las tendencias de la moda moderna ofrecen modelos de bufandas de punto. La gama de opciones que se presenta es amplia: pueden ser tanto versiones pequeñas, a veces en miniatura, como bufandas a cuadros que se pueden transformar rápidamente en un poncho o un abrigo corto. Las diversas líneas difieren en longitud, textura, corte y densidad de los materiales utilizados.
Los modelos anchos no solo pueden cubrir los hombros y el pecho, sino que también se convierten en un tocado único, aunque no son inferiores en términos de funcionalidad. Los modelos estrechos se pueden decorar en forma de lazo. Los métodos para decorar una imagen dependen del tipo de ropa exterior, la temporada, la forma de la cara, el color del cabello y el físico.
¿Cómo atar una bufanda de punto de forma correcta y hermosa?
Hacer un accesorio para crear una apariencia única se puede llamar un arte real. Cada modelo tiene sus propias técnicas, habiéndolas dominado, no será difícil cambiar la imagen.
A veces, las mujeres de la moda realizan experimentos audaces, creando su propio estilo con la ayuda de dos bufandas contrastantes a la vez. Por lo general, la versión de punto se elige en función de las preferencias de determinada ropa. Algunos modelos permiten llevar el producto sin atar. En este caso más simple, los extremos se colocan sobre el cuello y se enderezan.
Hay varias formas sencillas de llevar una bufanda alrededor del cuello.
Por ejemplo, el producto se endereza en longitud, el medio se aplica en la parte delantera en la base del cuello, los extremos se cruzan en la parte posterior y se adelantan. En el caso de una longitud de accesorio larga, se pueden realizar dos vueltas. Otra opción es similar en técnica, pero la diferencia es que uno de los extremos libres se echa hacia atrás y se endereza.
La tercera opción consiste en atar los extremos de la bufanda. A veces (para longitudes largas) los extremos se saltan al frente debajo del cinturón.
Una forma interesante y popular de atar un accesorio es el llamado lazo. Para hacer esto, el producto se dobla por la mitad, se tira alrededor del cuello, enhebrando los extremos libres en el bucle resultante. Queda por apretarlo un poco, y el diseño elegante está listo. Este diseño va bien con una chaqueta, una chaqueta de plumas, así como una chaqueta de cuero y un abrigo.
La decoración original del disfraz será una corbata, que en su apariencia se asemeja a este accesorio. Tal diseño se realiza de manera bastante simple: el producto se envuelve alrededor del cuello, luego los extremos cruzados en la parte posterior se adelantan y se atan debajo del accesorio, cubriendo el nudo. La opción de nudo libre se realiza de la forma más simple, mientras que los extremos colgantes se atan con un nudo en cualquier lugar, según las preferencias.
Un nudo falso proporciona el siguiente procedimiento: se ata un nudo ligero y débil en cada extremo, luego se enhebra el extremo libre en el nudo resultante y se aprieta cerca del cuello. Un accesorio de este tipo en una combinación de colores hábil es perfecto para un abrigo, chaqueta, estilo de negocios o deportivo.
El diseño del arco no es menos interesante. Se adapta a personas brillantes y atrevidas. Para crearlo, se echa el pañuelo sobre la cabeza para que un extremo sea mucho más corto que el otro. La sección larga forma un anillo y se contrae en el centro. El extremo libre corto envuelve el anillo de abajo hacia arriba en el punto de sujeción. Luego, la estructura se aprieta, mientras se eleva el arco al nivel deseado. El pañuelo con lazo combina bien como complemento con un impermeable o abrigo de estilo clásico.
También es interesante el método de tejido, que comienza con el habitual lanzamiento simple y enrollado de la bufanda alrededor del cuello con los extremos cruzados y adelantados. El lazo resultante en el cofre se tira ligeramente hacia atrás y se retuerce en forma de ocho. Los extremos libres se enroscan en el anillo inferior de la figura ocho: uno de arriba a abajo, el otro, por el contrario, luego la estructura se aprieta un poco. Esta opción va bien con una chaqueta de cuero.
Una dirección separada en el arte de la decoración está ocupada por modelos volumétricos. Entre ellos, el más interesante es una bufanda o un collar. Por lo general, está hecho de lana gruesa, mohair, cachemira. El tejido grueso le da un volumen extra. Puede ser todo tipo de trenzas, bandas elásticas, patrones de fantasía, pinceles y decoración en forma de inserciones de piel y pompones.
Una redecilla sin fin se elabora de diferentes formas. Puede girar una figura de ocho, arrojarla sobre sus hombros, hacer una capucha con un anillo, ponerla en su cabeza y enderezar los pliegues formados. La singularidad de este modelo radica en el hecho de que le permite cambiar la apariencia y el propósito de la plantilla más allá del reconocimiento. Puede ser no solo una versión combinada de una bufanda y un tocado, sino también un chaleco, un bolero e incluso un poncho.
Una redecilla larga se puede enrollar alrededor del cuello varias veces. El modelo en este caso depende de la temporada: cuanto más frío, más gruesos son los hilos y más grande el patrón. Una bufanda ancha de punto cuadrada o rectangular es ideal para atar un triángulo. Para ello, la bufanda se hace al frente con un ángulo, llevando los extremos hacia atrás. Luego se atan con un nudo debajo del producto o se vuelven a cruzar, atándolos a un lado. La versión cuadrada se realiza de manera similar, solo que al principio se pliega en diagonal. La mejor combinación de un accesorio sería un abrigo o un impermeable.
Cualquiera que sea la opción elegida para el diseño de la bufanda, está destinada a calentar, decorar y complementar el conjunto, haciéndolo más expresivo.Por ello, es necesario tener en cuenta las correctas combinaciones de color, tamaño y diseño de los modelos para que la imagen sea completa y armoniosa.